¡Bienvenido, querido aprendiz!
Aquí, tú y sólo tú serás el protagonista. Podrás aprender, opinar, reflexionar, preguntar, criticar, protestar, informar… y descubrirás el poder de las palabras si las utilizas adecuadamente.

martes, 25 de marzo de 2014

VIAJE LITERARIO POR ALGUNOS LUGARES DE ESPAÑA CON AUTORES DE LA GENERACIÓN DEL 98

    Introducción
  Y, mientras los autores modernistas prefirieron la evasión en el espacio y en el tiempo como reflejo de su inconformismo ante la realidad de la época, ambientando sus creaciones en la mitología griega, por ejemplo, para los autores de la Generación del 98, el paisaje representaba la forma de ser de un pueblo e incluso una forma de comportarse a lo largo de la historia, hasta el punto que llegó a decir Azorín: “Un escritor será tanto más artista cuanto mejor sepa interpretar la emoción del paisaje”. No resulta extraño, por tanto, que un conjunto de poemas de los autores de la Generación del 98 y, en especial, la obra fundamental de Antonio Machado, Campos de Castilla, constituyan un singular libro de viajes en el que se describe de forma lírica un paisaje desde el punto de vista geográfico, espiritual y sentimental, de tal manera que los poemas logran captar la esencia de los lugares mencionados, el magnetismo de su luz y su inmensidad.
  A continuación, te proponemos hacer un recorrido literario por hermosos lugares de la geografía española a través de los ojos de algunos autores del 98.

     Tarea
  Elabora una guía turística con los lugares de España que vamos a visitar en nuestro viaje literario, en los que incluyas fotografías, dibujos y descripciones paisajísticas de autores del 98.

     Proceso
1º) Organización. Se distribuyen los trabajos individualmente de tal manera que todos los autores y los lugares estén representados.
2º) Distribución del trabajo. Se asignan los siguientes temas:
     a) Andalucía: Antonio Machado
     b) Castilla: Antonio Machado
     c) Castilla: José Martínez Ruiz, “Azorín”
     d) Castilla: Miguel de Unamuno
     e) País Vasco: Pío Baroja
     f) Galicia: Ramón María del Valle-Inclán
     g) Canarias: Domingo Rivero 
     h) Canarias: Tomás Morales
     i) Canarias: Saulo Torón
     j) Canarias: Miguel de Unamuno
     k) Valencia: José Martínez Ruiz, “Azorín”.
3º) Presentación. Para presentar tu trabajo debes tener en cuenta las siguientes indicaciones:
     - Utilizar, preferentemente, los programas Power Point o Word.
     - Emplear un folio en blanco.
     - Distribuir la información de manera clara y atractiva, teniendo en cuenta las siguientes indicaciones: 
        incluir imágenes representativas del paisaje, un titular que destaque algún rasgo característico del 
        paisaje que incite a su visita, el fragmento descriptivo del autor y su nombre en el margen derecho al 
        final del mismo.
      - Entregar por correo electrónico el viernes, 28 de marzo, como fecha final. Recuerda: no se valorará 
         ningún trabajo que no cumpla estrictamente estas indicaciones o sea una copia.

    Recursos
     Te proponemos una serie de enlaces que te pueden servir para buscar la información que necesitas para este viaje literario.
      a) Andalucía: Antonio Machado,”Esta luz de Sevilla... Es el palacio...”, “El limonero lánguido             
          suspende...”, “Recuerdos”, “En estos campos de la tierra mía...”         
           http://jaserrano.nom.es/Machado/Soledades.htm
       b) Castilla: Antonio Machado, “Orillas del Duero”, “Campos de Soria”, “Las encinas”
            http://jaserrano.nom.es/Machado/Campos.htm
       c) Castilla: José Martínez Ruiz, Azorín, en http://roble.pntic.mec.es/msanto1/lengua/2g98.htm  o                 “Yo veo las llanuras dilatadas, inmensas, con una lejanía de cielo radiante y una línea azul, 
           tenuemente azul, de una cordillera de montañas. Nada turba el silencio de la llanada; tal vez 
           en el horizonte aparece un pueblecillo, con su campanario, con sus techumbres pardas. Una 
           columna de humo sube lentamente. En el campo se extienden, en un anchuroso mosaico, los 
           cuadros de trigales, de barbechos, de eriazo. En la calma profunda del aire revolotea una 
           picaza, que luego se abate sobre un montecillo de piedras, un majano, y salta sobre él para 
           revolotear luego otro poco. Un camino, tortuoso y estrecho, se aleja serpenteando; tal vez las 
           matriarias inclinan en los bordes sus botones de oro. ¿No está aquí la paz profunda del 
           espíritu? Cuando en estas llanuras, por las noches, se contemplen las estrellas con su 
            parpadear infinito, ¿no estará aquí el alma ardorosa y dúctil de nuestros místicos? 
       d) Castilla: Miguel de Unamuno, “Salamanca”, en
http://gredos.usal.es/jspui/bitstream/10366/79976/1/Interpretacion_del_motivo_Salamanca_en.pdf
       e) País Vasco: Pío Baroja en prólogo a su obra Zalacaín el Aventurero             
           (http://es.wikisource.org/wiki/Zalaca%C3%ADn:_0)1 o “Comenzaba el día; pálidos resplandores            iban surgiendo en el Oriente; como hebras de oro en un mar sombrío se destacaban los 
           primeros rayos del sol al herir las nubes. Sobre los valles se extendía la niebla compacta y 
          densa, como un sudario gris que se agitara con el viento. [...] Mientras tanto, el sol ascendía y 
          la niebla comenzaba a rasgarse; aquí se presentaba un caserío en medio de sus heredades, 
          como ensimismado en su tristeza; allá un campo de trigo ya amarillento que tenía sus olas 
          como un pequeño mar; en las cumbres las aliagas doradas brotaban entre las rocas y parecían 
          rebaños que subían por el monte. Tendiendo la vista lejos se veía un laberinto de montañas, 
          como si fueran olas inmensas de un mar solidificado; en unas, la espuma parecía haberse 
          trocado en la piedra calcárea que las coronaba; otras montañas eran redondas, verdes, 
          oscuras, como las olas del interior del mar.”
        f) Galicia: Ramón María del Valle-Inclán, en http://www.ilbolerodiravel.org/med-online/med-online/valleInclan-otonoPrel.pdf
        g) Canarias: Domingo Rivero, “El muelle viejo” en página 24,
             http://idd005dz.eresmas.net/conferencias/conf6.pdf
        h) Canarias: Tomás Morales, (“I. Puerto de Gran Canaria sobre el sonoro Atlántico”, “II. La   
            taberna del muelle tiene mis atracciones”, “Canto a la ciudad comercial" (desde el verso “Es la  
            Plaza. Gente...” hasta el verso “...trocados en libras, marcos o florines!...”), “La calle de Triana”                   (los 20 primeros versos), “Estampa de la ciudad primitiva”, “Tiendecitas de turcos”(los 36 primeros 
            versos), “Calle de La Marina” (los 24 primeros versos) y “El Barrio de Vegueta” (los cuatro 
            primeros versos + […] + desde el verso “Yo prefiero estas calles serias y luminosas...” hasta el 
            verso “...y el bernegal de barro rebosando agua fresca...”) en el libro de poemas Las rosas de 
            Hércules (biblioteca).

viernes, 21 de marzo de 2014

LA MITOLOGÍA EN EL MODERNISMO.PLAN LECTOR 4º DE ESO. CURSO 2013-2014

    Introducción
       En el Modernismo, la búsqueda de un mundo de refinada belleza se convierte en el único medio de huir de la vulgaridad de la vida burguesa de la sociedad de la época y de mostrar su desacuerdo con ella. Este rechazo del presente se manifiesta en la evasión de la realidad cotidiana a través de evocaciones históricas y legendarias (evasión en el tiempo y en el espacio): el mundo oriental, la Edad Media, la mitología griega, etc. En estas evocaciones de tiempos pasados y ambientes exóticos y refinados abundan las ninfas y dioses mitológicos, los palacios y castillos, los cisnes -símbolo de la belleza modernista-, las princesas, etc.
       Te proponemos la elaboración de una antología poética de los autores modernistas con poemas basados en la mitología griega.


    Tarea
            Selecciona poemas de los autores modernistas basados en la mitología griega, indica qué simbolizan y acompáñalos de una imagen, así como de un brevísimo resumen de cada mito recreado.
       
    Proceso
    1º) Organización. Se distribuyen los temas individualmente.

    2º) Distribución del trabajo. Se asignan los siguientes temas:
    a) Rubén Darío
    b) Antonio Machado
    c) Juan Ramón Jiménez
    d) Tomás Morales
    e) Domingo Rivero
    d) Saulo Torón


    3º) Investigación. Se busca un poema del autor asignado en el paso anterior (no se puede cambiar el poema, en ese caso, será anulado), así como información sobre el mito recreado para realizar el resumen (en no más de 60 palabras) y una imagen que lo represente. En el apartado "Recursos" se sugieren algunas páginas de consulta.

    4º) Presentación. Para presentar tu trabajo debes tener en cuenta las siguientes indicaciones:
    - Utilizar, preferentemente, los programas Power Point o Word.
    - Emplear un folio en blanco y formato apaisado (horizontal).
    - Distribuir la información de la siguiente forma: el poema, lo que simboliza en un solo enunciado a modo de título, la imagen y el resumen del mito en no más de 60 palabras) de manera clara, original y atractiva. Recuerda indicar el título del poema, si lo tiene, al principio y colocar el nombre del autor debajo del último verso a la derecha.
    - Entregar impreso el martes, 22 de abril, como fecha final. Recuerda: no se valorará
    ningún trabajo que no cumpla estrictamente estas indicaciones y que sea una copia..

    Recursos
    Te proponemos una serie de enlaces que te pueden servir para buscar la información que necesitas para elaborar nuestra antología de poemas mitológicos de autores modernistas.
        a) Rubén Darío: “Caupolicán”, “Coloquio de los centauros” ( Introducción / Quirón -desde “Cuando del sacro abuelo la sangre luminosa...” hasta “...señora de los besos y de los corazones.”-/ Reto /  Folo / Eurito / Hipea / Odites / Clito y Medón) y “Thanathos” en http://www.poemas-del-alma.com/ruben-dario.htm
        b) Antonio Machado: “Pegasos, lindos pagasos” en http://www.poetasandaluces.com/poemas.asp?idAutor=1#letra_A
        c) Juan Ramón Jiménez: “Ahogada” en http://www.poesi.as/jrj36107.htm; “Balada de la mujer morena y alegre” http://www.poetasandaluces.com/poemas.asp?idAutor=18; y “A Antonio Machado” en http://www.camino-latino.com/spip.php?article159
        d) Tomás Morales: "Romance de Nemoroso", "Canto inaugural" (solo los 21 primeros versos; y desde el verso 22 al 36 otra persona ),"Balada del niño arquero" (primeros 24 versos), Canto a la ciudad comercial" (los18 primeros versos) e "Himno al volcán" (desde el verso "Y un día que al ensueño dabas, rendido, la ardiente entraña..." hasta el verso "...y tus fraguas que azuzan las reptaciones del terremoto.") en el libro de poemas Las rosas de Hércules (biblioteca)
        e) Domingo Rivero:”A Tomás Morales (con motivo de su versos del Diario del cortijo)” y “Unamuno” en http://www.academiacanarialengua.org/archipielago/domingo-rivero/textos/#start


miércoles, 12 de febrero de 2014

RUMBO A LA LITERATURA REALISTA


Quizás no me conozcas. Voy a presentarme. Mi nombre es Benito Pérez Galdós y nací allá por el año de 1843 en Las Palmas de Gran Canaria. Estudié Derecho en Madrid, donde residí el resto de mi vida; sus calles y ambiente serían el escenario de muchas de las novelas que escribí, un total de sesenta y siete, a través de las cuales se puede reconstruir la vida española del siglo XIX. Y es que, como ya sabes, uno de los rasgos de la literatura realista es, precisamente, la descripción detallada de personajes, ambientes, etc. con el fin de retratar lo más fiel posible la realidad que nos rodeaba y denunciar la situación de la sociedad del momento.
     Ahora es tu turno. Vamos a repasar juntos la descripción, un tipo de texto en el que se explica cómo es algo o alguien, pero para ello primero hay que observar atentamente lo que se va a describir para captar sus características; después, es necesario seleccionar los rasgos más significativos y, por último, se deben ordenar esos datos de alguna forma.
   Fíjate en esta fotografía en la que aparezco con mi perro. Obsérvala detenidamente y, especialmente, a mí: mi postura, mis manos, mi expresión, de qué manera voy vestido... Recuerda que, al describir a una persona, tanto en la literatura como en la vida real, suele darse información sobre dos aspectos: apariencia externa (rasgos físicos, forma de vestir...) y su carácter y personalidad (forma de ser y de comportarse, rasgos morales, modo de vida...). Según predominen unos u otros rasgos, existen diferentes tipos de descripciones de personas: prosopografía o descripción de su aspecto físico, etopeya o descripción del carácter y de los rasgos morales, retrato o descripción tanto de la apariencia física como de la forma de ser y caricatura o exageración de algunos rasgos deformándolos.


    Tu primera tarea consistirá en realizar una descripción en 100 palabras en la que reflejes cómo me muestro y lo que te sugiero en función del tipo de descripción que te ha tocado realizar (prosopografía, etopeya, retrato o caricatura). Para la caricatura, el retrato y la etopeya debes consultar mi biografía para que conozcas más datos sobre mi personalidad, ideología, gustos, etc.: http://www.cervantesvirtual.com/bib/bib_autor/galdos/
      Se presentará el martes 18 de febrero de 2014 en folio en blanco y en formato Word, respetando los márgenes y cuidando la ortografía. Llevará por título el tipo de descripción que realices todo en mayúsculas y centrado, p. ej. PROSOPOGRAFÍA DE BENITO PÉREZ GALDÓS. Tu nombre completo y curso debe aparecer debajo de la última línea en el margen derecho. ¡Ojo, lee bien estas instrucciones y se puntual en su entrega, te juegas mucho, porque si no cumples con ellas tu trabajo no será valorado!


    Una vez hechas las presentaciones, ya podemos continuar con mi labor de escritor. ¿Qué sabes de mi obra? ¿Y de otros escritores coetáneos y de sus obras? ¿Y de la literatura canaria de esta época? Te propongo guiarte en tu viaje al pasado, en el que a bordo de uno de los grandes inventos de la época, el barco de vapor, surcaremos un mar de información para desvelar estas y otras incógnitas en torno a la literatura de la segunda mitad del siglo XIX.

1º.- Organizamos a la tripulación en grupos de trabajo de cuatro miembros cada uno.

2º.- Distribuimos las tareas (sólo se realizará una por grupo de trabajo).

   a) Elaborar un eje cronológico en el que figuren los tres grupos en los que se clasifican mis obras, separados por colores, con la fecha de publicación en negrita, los títulos en cursiva y la temática de cada una.Tienes un ejemplo de eje cronológico en las páginas 134 y 135 de tu libro de texto.
   Se debe presentar en hoja apaisada (horizontal) y formato Word con el título en mayúsculas: LAS OBRAS DE BENITO PÉREZ GALDÓS.

    b) Elaborar un eje cronológico en el que figuren los dos movimientos literarios de la literatura española de la segunda mitad del siglo XIX, separados por colores, así como el año de publicación de cada una de las obras más destacadas en negrita y su título en cursiva, y las imágenes, los nombres y la fecha de nacimiento y muerte de sus autores. Tienes un ejemplo de eje cronológico en las páginas 134 y 135 de tu libro de textoEn todo eje cronológico deben aparecer las fechas que indican cada acontecimiento: año de aparición, por ejemplo.
   Se debe presentar en hoja apaisada (horizontal) y formato Word con el título en mayúsculas: LA LITERATURA ESPAÑOLA DEL SIGLO XIX.

   c) Elaborar un eje cronológico en el que figure el año de publicación de cada una de las obras más destacadas en negrita y su título en cursiva, así como las imágenes, los nombres y la fecha de nacimiento de los autores de la literatura europea del siglo XIXTienes un ejemplo de eje cronológico en las páginas 134 y 135 de tu libro de texto.
  Se debe presentar en hoja apaisada (horizontal) y formato Word con el título en mayúsculas: LA LITERATURA EUROPEA DEL SIGLO XIX.

   d) Elaborar un mapa conceptual con las tendencias de la literatura canaria del siglo XIX, su temática y características de estilo, así como la imagen, el nombre y la fecha de nacimiento y muerte de los autores y el título de sus obras principales. Recuerda que ya tuviste la oportunidad de saber cómo se hacía un mapa conceptual, pues tuviste que completar uno correspondiente al Romanticismo. Ahora te toca a ti elaborar uno, para ayudarte puedes pinchar en el siguiente enlace: http://www3.gobiernodecanarias.org/medusa/ecoblog/alpergon/category/tecnicas-de-trabajo-2/el-mapa-conceptual/
   Se debe presentar en hoja apaisada (horizontal) y formato Word con el título en mayúsculas: LA LITERATURA CANARIA DEL SIGLO XIX.

    e) Redactar, en forma de esquema, la biografía de los siete poetas regionalistas laguneros cuyos bustos se encuentran en el casco histórico de San Critóbal de La Laguna: Zerolo, Perera, Hernádez Amador, Tabares, Verdugo, Manrique y Pérez Delgado -Nijota-.
     Se debe presentar en formato Word, respetando los márgenes y siguiendo las siguientes indicaciones: nombre del poeta centrado y en mayúsculas, debajo y a la izquierda una imagen del poeta y al lado se inicia el esquema dedicando una línea a cada fecha destacada en negrita, indicando como primera fecha la del nacimiento y como última la de la muerte (p. ej. 1843: nace en Las Palmas de Gran Canaria, primera fecha, y 1920: muere en Madrid, última fecha). Se consideran fechas destacadas aquellas que influyen de alguna manera en la vida y la obra del poeta: viaje, nacimientos, muertes, matrimonios, publicaciones de obras, enfermedades, premios, etc.

     f) Redactar, en forma de esquema, la biografía de las poetisas canarias que irrumpen, por primera vez, en el panorama literario de Canarias en el siglo XIX: María Joaquina Viera y Clavijo, Victoria Ventoso y Cullen, Fernanda Siliuto Briganty, Cesarina Bento Montesino, Isabel Poggi de Llorente, Dolores Stanilas, Francisca Fleitas, Ana Laso de Curbelo, Carmen G. del Castillo y Agustina González y Romero -La Perejila-.
     Se debe presentar siguiendo las mismas pautas recogidas en el apartado e).
     
     g) Elaborar una antología poética de la literatura canaria del siglo XIX, distribuida en función de las tendencias que la conforman y los temas tratados.
      Se debe presentar en formato Word, respetando los márgenes y siguiendo las siguientes indicaciones: Título de la composición, si lo tiene, en mayúsculas, centrado; a continuación la composición poética; y, por último, en el margen derecho de la composición, justo debajo del último verso, los apellidos del autor en mayúsculas, coma y el nombre, seguido de coma y del título de la obra a la que pertenece la composición en cursiva, coma y el año de publicación.

3º.- Zarpamos y surcamos, durante una semana, el mar de recursos que te propongo a continuación en busca de toda la información necesaria.


    b) LA LITERATURA ESPAÑOLA DEL SIGLO XIX:
          c) LA LITERATURA EUROPEA DEL SIGLO XIX:

         d) LA LITERATURA CANARIA DEL SIGLO XIX: véase enlaces g)
    e) Los poetas laguneros regionalistas: véase enlaces g)



    http://www.gevic.net/info/capitulos_cat.php?idcategoria=25: pinchar en el apartado 5. Romanticismo y Realismo del siglo XIX: la poesía ("Mujeres poetas")

    g) Antología poética de la literatura canaria del siglo XIX:
    http://www.gevic.net/info/capitulos_cat.php?idcategoria=25: pinchar en el apartado 5. Romanticismo y Realismo del siglo XIX: la poesía 

4º.- Llegó el momento de arribar a puerto. Lee detenidamente tu tarea y consulta las dudas necesarias; a continuación, documéntate en los enlaces propuestos; selecciona la información que se te pide; y finalmente, presenta tu tarea según las indicaciones, preferentemente por email, el 25 de febrero de 2014. No podrás arribar a puerto si no sigues estrictamente las instrucciones o llegas tarde y, por tanto, no podrás superar la tarea encomendada.

5º.- Una vez en tierra, se valorará el rigor en el seguimiento de las instrucciones, la adecuada presentación, así como la calidad de la información seleccionada y la correcta expresión de la misma.

                                                    ¡ANIMO Y FELIZ TRAVESÍA!

jueves, 23 de enero de 2014

CAMPAÑA PUBLICITARIA: "NO NOS DEJAREMOS ARREBATAR LA PAZ"

   La novela titulada Guerra y Paz del ruso León Tolstoi y ambientada durante la invasión napoleónica a Rusia demuestra que la historia del ser humano es la historia de la guerra, que, desgraciadamente, sigue siendo aún hoy una realidad. 

     En cualquier periódico podemos encontrar alguna noticia que hace referencia a conflictos bélicos; sin embargo, una gran parte de ellos ni siquiera aparece en los medios de comunicación. Las grandes guerras, como las dos guerras mundiales, han sido sustituidas por múltiples enfrentamientos a lo largo del planeta y, muy especialmente, en el Tercer Mundo, lo que suma a la hambruna y a las necesidades más apremiantes, violencia, asesinatos indiscriminados, migraciones de poblaciones hacia otros países… Los pocos recursos de que disponen se invierten, paradójicamente, en armamento.
     ¿Es posible una paz duradera y mundial? ¿Se seguirán fabricando armas mientras exista el ser humano sobre la Tierra?
     El 30 de enero de cada año desde 1964, se celebra el Día Escolar de la Paz y la No-Violencia, reconocido por la Organización de las Naciones Unidades (ONU) en 1993 por ser, además, el día en que en 1948 fue asesinado a tiros por un fanático hinduista el líder nacional y espiritual de la India, el Mahatma Gandhi, ejemplo y símbolo de la paz en el mundo. Su objetivo es la educación en y para la tolerancia, la solidaridad, la concordia, el respeto a los Derechos Humanos, la no-violencia y la paz.
    El mensaje básico de este día es: ’Amor universal, No-violencia y Paz. El Amor universal es mejor que el egoísmo, la No-violencia es mejor que la violencia y la Paz es mejor que la guerra’.
    En este día, los colegios y centros se convierten en instrumentos de paz y entendimiento entre personas de distinta formación, raza, cultura y religión. Por ello te proponemos la realización de una campaña publicitaria a favor de la paz, la tolerancia, el respeto a los Derechos Humanos y, en definitiva, en pro de la erradicación de la violencia, que hemos titulado, con palabras de Rafael Alberti,  "¡No nos dejaremos arrebatar la paz!" y que consiste en diseñar, en parejas, un anuncio gráfico sobre el conflicto social elegido en la tarea anterior ¿Y tú qué opinas sobre... los conflictos sociales?  Sigue las siguientes indicaciones.

      1º. Consulta las páginas 102 y 103 de tu libro de texto. A continuación, pincha en el siguiente enlace              para conocer los rasgos principales del texto publicitario y realiza las actividades que se plantean:                  http://roble.pntic.mec.es/~msanto1/lengua/2publici.htm

      2º. Diseñen el anuncio utilizando estos elementos:
               - Un lema o eslogan que sea personal y original.
               - Imágenes personales y originales
               - Presentación personal y original.

       3º. Emplea los siguientes recursos usuales de la publicidad:
              - Símiles y metáforas, onomotapeyas, juegos de palabras, etc.
              - Voces extranjeras y neologismos, enunciados sin verbo, verbos en imperativo o en 2ª persona,                   oraciones interrogativas…

       4º. Presentación final del anuncio preferentemente en Power Point  (Word u otro programa si no se                  dispone del indicado) y solo una hoja.


El eslogan se coloca debajo de la fotografía y no encima como en el ejemplo, y sobre la fotografía deberás poner solo PORQUE... (recuerda que el enunciado que debes completar con tu eslogan es: "No nos dejaremos arrebatar la paz porque..." ). La fotografía debe estar estrechamente relacionada con el eslogan y este con el tema elegido, en este caso, la pobreza)


NO SE VALORARÁ NINGÚN TRABAJO QUE NO CUMPLA ESTRICTAMENTE LAS INSTRUC-CIONES ARRIBA INDICADAS.

miércoles, 22 de enero de 2014

¿Y TÚ QUE OPINAS SOBRE... LOS CONFLICTOS SOCIALES?

    Fedor Dostoievski, gran escritor ruso del siglo XIX, escribió una novela titulada Crimen y castigo, cuyo argumento gira en torno a la conflictividad social: un hombre vive en la miseria y comete un crimen por el que será juzgado y castigado. Pero… ¿qué movió al protagonista a cometer el crimen?
   A pesar de que nuestra sociedad se considera, en términos generales, avanzada, existen problemas sociales graves. A veces ignoramos que, en nuestro propio entorno existen personas que sufren marginación, que no tienen empleo, que están sumidas en la drogadicción, etc., sobre todo en las grandes ciudades.
   En la actualidad, la violencia se considera un problema sin resolver al que asistimos casi diariamente con perplejidad, con indignación, pero ¿qué se puede hacer?, ¿qué actitud podemos tomar nosotros?, ¿qué hacer ante las injusticias?
   Vas a elaborar por escrito e individualmente una argumentación que tendrá que defenderse oralmente y por parejas.
      Fase individual. El proceso que vas a seguir es el siguiente:

           a) Cada pareja elige un tema de este listado:
           - ¿Se pisotean los derechos humanos?
           - ¿Todos somos iguales?
           - Inseguridad ciudadana
           - Derecho a la vida
           - Protestas callejeras
           -La inmigración
           -Los desahucios
           -Matrimonios homosexuales
           -La violencia de género, el acoso...
           -¿Somos solidarios?
           -¿Un mundo feliz?
           -La práctica del “botellón”, las drogas...
           -El uso de Internet
           -La explotación laboral
         b) Los dos componentes de la pareja se distribuyen los papeles “a favor” o “en contra” en relación con el tema de debate.
       c) Búsqueda de información, de tal manera que los razonamientos tengan una adecuada fundamentación. Es frecuente acudir a datos estadísticos, que proceden, por lo general, de organizaciones o instituciones con credibilidad y reconocido prestigio.
      d) Organización de la información. Elabora previamente un borrador individual con los datos básicos de introducción, tesis, argumentos y propuesta. Puedes ayudarte de los siguientes recursos: 
                            - Introducción: explica la importancia de tu tema en relación con las personas o la                                         sociedad. También puedes indicar la existencia de distintas posiciones sobre el tema.
                - Presentación de la tesis: utiliza fórmulas como: “En mi opinión…”, “Yo creo…”, “Desde mi                    punto de vista…”, “Considero que…”

              - Presentación de argumentos:  elabora dos o tres argumentos en defensa de tu posición (puedes                   emplear distintos tipos de argumentos: datos, ejemplos, autoridad, causa, consecuencia) y, al                        menos, un contraargumento de refutación. Utiliza expresiones como: “Algunos piensan que…”,                  “Se dice…”
                 - Presentación de la propuesta: utiliza fórmulas como: “Hay que…”, “Es necesario…”, “Sería                   conveniente…”, “Es fundamental…”
e) Producción del texto. Una vez elaborado el borrador, debes proceder a la redacción definitiva. Cada miembro redactará su opinión argumentada (texto argumentativo).
      El trabajo se presentará en formato Word en dos hojas, una por cada componente, en la que se se pondrá el título en la parte superior, a continuación el texto y en el margen inferior derecho el nombre completo del alumno y el curso.
       Te ofrecemos un ejemplo:

                                                               Mis programas de televisión favoritos
               Mucho se habla sobre los programas de televisión quevemos los jóvenes y sobre si estos tienen               efectos negativos o si son educativos.                                        Introducción        
                Lo  que más nos gusta e interesa a los jóvenes de hoy son las series televisivas protagonizas por             jóvenes como  Compañeros o Al salir de clase,   Tesis principal (ejemplos)                                              porque tratan temas que también nos afectan a nosotros, como la relación con los padres, el instituto,           los novios y novias, los amigos, el alcohol, la imagen personal, etc.     Argumento                                            Aunque algunos piensan que estos programas dan mal ejemplo,   Contraargumento           
          yo creo que no deben desaparecer, pues nos gustan a  la mayoría y no hacen  nada malo sino reflejar           la vida real, y además las cadenas ganan con ellos  mucho dinero.    Propuesta (actúa como una                 segunda tesis).
                                                                                          
 Fase de “escenificación por parejas”: debate a dos bandas
            a) Cada miembro explica oralmente su tesis y argumentos a la pareja y al conjunto de la clase.
            b)      Se abre una fase de debate oral entre los dos componentes de la pareja en la  que cada miembro da razones de la manera más convincente posible con el objeto de persuadir al otro y desbaratar sus argumentos.
          c)       Al argumentar oralmente se deben tener en cuenta algunas consideraciones para conseguir nuestro objetivo: convencer (consulta las páginas 298 y 299 de tu libro de texto).
-          Hay que tener en cuenta la formación, ideas y cultura de los oyentes para no usar informaciones desconocidas ni un vocabulario ininteligible.
-          Evitar la ofensa con la exposición de nuestras ideas y respetar las contrarias.
-          Mirada fija en los receptores, gesto convincente y expresión sin duda ni temor.
-          Tono de voz moderado y voz sin vibraciones ni titubeos.
-          Argumentos claros y breves.
-          Introducción de alguna anécdota que entretenga, distraiga y fomente una actitud positiva en el oyente.
-          Anticiparse a las dudas del receptor con expresiones del tipo “Estarán ustedes pensando…”, “Tendrán dudas acerca de…”
-          Recordar la tesis al principio y al final, indicando en que esa es la idea que se defiende. También conviene recordar al final los argumentos más relevantes.

martes, 26 de noviembre de 2013

EL REALISMO: RETRATO DE UNA ÉPOCA

   

   La literatura realista se ocupó de diferentes aspectos de la sociedad de la época (la burguesía, la crítica a la sociedad, la pintura detallada de ambientes, costumbres y caracteres...). A continuación te proponemos algunos fragmentos que ilustran varias características del Realismo y de su época.

1. La observación objetiva de la realidad. Se busca reproducir la realidad de la época. Para ello se toman como modelo los métodos de observación científica. 
    Lee el siguiente fragmento de Pepita Jiménez, de Juan Valera y responde a las cuestiones:

Mi padre, sin advertir nada, me acusa de extravagante; me llama búho, y se empeña también en que vuelva a la tertulia. Anoche no pude ya resistirme a sus repetidas instancias, y fui muy temprano, cuando mi padre iba a hacer las cuentas con el aperador.
¡Ojalá no hubiera ido!

Pepita estaba sola. Al vernos, al saludarnos, nos pusimos los dos colorados. Nos dimos la mano con timidez, sin decirnos palabra.
Yo no estreché la suya: ella no estrechó la mía; pero las conservamos unidas un breve rato.
En la mirada que Pepita me dirigió nada había de amor, sino de amistad, de simpatía, de honda tristeza.
Había adivinado toda mi lucha interior: presumía que el amor divino había triunfado en mi alma; que mi resolución de no amarla era firme e invencible.
No se atrevía a quejarse de mí; no tenía derecho a quejarse de mí; conocía que la razón estaba de mi parte. Un suspiro, apenas perceptible, que se escapó de sus frescos labios entreabiertos, manifestó cuánto lo deploraba.
Nuestras manos seguían unidas aún. Ambos mudos. ¿Cómo decirle que yo no era para ella, ni ella para mí?; ¡Qué importaba separamos para siempre!
Sin embargo, aunque no se lo dije con palabras, se lo dije con los ojos. Mi severa mirada confirmó sus temores: la persuadió de la irrevocable sentencia.
De pronto se nublaron sus ojos; todo su rostro hermoso, pálido ya de una palidez traslúcida, se contrajo con una bellísima expresión de melancolía. Parecía la madre de los dolores. Dos lágrimas brotaron lentamente de sus ojos y empezaron a deslizarse por sus mejillas.
No sé lo que pasó en mí. ¿Ni cómo describirlo, aunque lo supiera?
Acerqué mis labios a su cara para enjugar el llanto, y se unieron nuestras bocas en un beso.
Inefable embriaguez, desmayo fecundo en peligros invadió todo mi ser y el ser de ella. Su cuerpo desfallecía y la sostuve entre mis brazos.
Quiso el cielo que oyésemos los pasos y la tos del padre vicario que llegaba, y nos separamos al punto.Volviendo en mí, y reconcentrando todas las fuerzas de mi voluntad, pude entonces llenar con estas palabras, que pronuncié en voz baja e intensa, aquella terrible escena silenciosa:

-¡El primero y el último!

   1.1. Explica el tipo de narrador en este texto.
   1.2. La escena refleja una gran emoción y sensibilidad. ¿Por qué considera que es inefable (pasajero) el
          sentimiento amoroso?
   1.3. ¿Qué se describe en este texto?

2. Las descripciones.  Aparecen con frecuencia las descripciones para transmitir la idea más exacta posible de la sociedad contemporánea: incluyen sectores sociales como las clases medias y bajas, y analizan los temperamentos y las motivaciones de los personajes, sus cualidades y defectos. 
     Lee el fragmento de Misericordia, de Benito Pérez Galdós y responde a las cuestiones:

Eran tres las que así chismorreaban, sentaditas a la derecha, según se entra, formando un grupo separado de los demás pobres, una de ellas ciega, o por lo menos cegata; las otras dos con buena vista, todas vestidas de andrajos, y abrigadas con pañolones negros o grises. La señá Casiana, alta y huesuda, hablaba con cierta arrogancia, como quien tiene o cree tener autoridad; y no es inverosímil que la tuviese, pues en donde quiera que para cualquier fin se reúnen media docena de seres humanos, siempre hay uno que pretende imponer su voluntad a los demás, y, en efecto, la impone. Crescencia se llamaba la ciega o cegata, siempre hecha un ovillo, mostrando su rostro diminuto, y sacando del envoltorio que con su arrollado cuerpo formaba, la flaca y rugosa mano de largas uñas. La que en el anterior coloquio pronunciara frases altaneras y descorteses tenía por nombre Flora y por apodo la Burlada, cuyo origen y sentido se ignora, y era una viejecilla pequeña y vivaracha, irascible, parlanchina, que resolvía y alborotaba el miserable cotarro, indisponiendo a unos con otros, pues siempre tenía que decir algo picante y malévolo cuando los demás repartijaban, y nunca distinguía de pobres y ricos en sus críticas acerbas. Sus ojuelos sagaces, lacrimosos, gatunos, irradiaban la desconfianza y la malicia. Su nariz estaba reducida a una bolita roja, que bajaba y subía al mover de labios y lengua en su charla vertiginosa. [...]
La mujer de negro vestida, más que vieja, envejecida prematuramente, era, además de nueva, temporera, porque acudía a la mendicidad por lapsos de tiempo más o menos largos, y a lo mejor desaparecía, sin duda por encontrar un buen acomodo o almas caritativas que la socorrieran. Respondía al nombre de la señá Benina (de lo cual se infiere que Benigna se llamaba), y era la más  callada y humilde de la comunidad, si así puede decirse; bien criada, modosa y con todas las trazas  de perfecta sumisión a la divina voluntad. Jamás importunaba a los parroquianos que entraban o  salían; en los repartos, aun siendo leoninos, nunca formuló protesta, ni se la vio siguiendo de cerca  ni de lejos la bandera turbulenta y demagógica de la Burlada. Con todas y con todos hablaba el mismo lenguaje afable y comedido; trataba con miramiento a la Casiana, con respeto al cojo, y únicamente se permitía trato confianzudo, aunque sin salirse de los términos de la decencia, con el ciego llamado Almudena, del cual, por el pronto, no diré más sino que es árabe, del Sus, tres días de jornada más allá de Marrakesh. Fijarse bien. 
Tenía la Benina voz dulce, modos hasta cierto punto finos y de buena educación, y su rostro moreno no carecía de cierta gracia interesante que, manoseada ya por la vejez, era una gracia borrosa y apenas perceptible. Más de la mitad de la dentadura conservaba. Sus ojos, grandes y obscuros, apenas tenían el ribete rojo que imponen la edad y los fríos matinales. Su nariz destilaba menos que las de sus compañeras de oficio, y sus dedos, rugosos y de abultadas coyunturas, no terminaban en uñas de cernícalo. Eran sus manos como de lavandera, y aún conservaban hábitos de aseo. Usaba una venda negra bien ceñida en la frente; sobre ella pañuelo negro, y negros el manto y vestido, algo mejor apañaditos que los de las otras ancianas. Con este pergenio y la expresión sentimental y dulce de su rostro, todavía bien compuesto de líneas, parecía una Santa Rita de Casia que andaba por el mundo en penitencia. Faltábanle sólo el crucifijo y la llaga en la frente, si bien podría creerse que hacía las veces de esta el lobanillo del tamaño de un garbanzo, redondo, cárdeno, situado como a media pulgada más arriba del entrecejo. 

    2.1. Sintetiza cómo se realizaba la mendicidad en la época de Galdós.
    2.2. ¿Qué tipo de descripción de persona se realiza? ¿Tiene relación con el texto de Juan Valera?
    2.3. Divide el texto en partes atendiendo a qué se describe en cada una de ellas.

3.La influencia del Naturalismo.
   Lee el siguiente fragmento de ¡Adiós, Cordera!, de Leopoldo Alas "Clarín y responde a las cuestiones:

   ¡Eran tres, siempre los tres!: Rosa, Pinín y la Cordera. 
   El prao Somonte era un recorte triangular de terciopelo verde tendido, como una  colgadura, cuesta abajo por la loma. Uno de sus ángulos, el inferior, lo despuntaba el camino de hierro de Oviedo a Gijón. Un palo del telégrafo, plantado allí como pendón de conquista, con sus jícaras blancas y sus alambres paralelos, a derecha e izquierda, representaba para Rosa y Pinín el ancho mundo desconocido, misterioso, temible, eternamente ignorado. Pinín, después de pensarlo mucho, cuando a fuerza de ver días y días el poste tranquilo, inofensivo, campechano, con ganas, sin duda, de aclimatarse en la aldea y parecerse todo lo posible a un árbol seco, fue atreviéndose con él, llevó la confianza al extremo de abrazarse al leño y trepar hasta cerca de los alambres. Pero nunca llegaba a tocar la porcelana de arriba, que le recordaba las jícaras que había visto en la rectoral de Puao. Al verse tan cerca del misterio sagrado le acometía un pánico de respeto, y se dejaba resbalar de prisa hasta tropezar con los pies en el césped. 
   Rosa, menos audaz, pero más enamorada de lo desconocido, se contentaba con arrimar el oído al palo del telégrafo, y minutos, y hasta cuartos de hora, pasaba escuchando los formidables rumores metálicos que el viento arrancaba a las fibras del pino seco en contacto con el alambre. Aquellas vibraciones, a veces intensas como las del diapasón, que aplicado al oído parece que quema con su vertiginoso latir, eran para Rosa los papeles que pasaban, las cartas que se escribían por los hilos, el lenguaje incomprensible que lo ignorado hablaba con lo ignorado; ella no tenía curiosidad por entender lo que los de allá, tan lejos, decían a los del otro extremo del mundo. ¿Qué le importaba? Su interés estaba en el ruido por el ruido mismo, por su timbre y su misterio. 
   La Cordera, mucho más formal que sus compañeros, verdad es que relativamente, de edad también mucho más madura, se abstenía de toda comunicación con el mundo civilizado, y miraba de lejos el palo del telégrafo como lo que era para ella efectivamente, como cosa muerta, inútil, que no le servía siquiera para rascarse. Era una vaca que había vivido mucho. [...]
   Desde aquel día en que adivinaron el peligro, Pinín y Rosa no sosegaron, A media semana se personó el mayordomo en el corral de Antón. Era otro aldeano de la misma parroquia, de malas pulgas, cruel con los caseros atrasados. Antón, que no admitía reprimendas, se puso lívido ante las amenazas de desahucio. 
   El amo no esperaba más. Bueno, vendería la vaca a vil precio, por una merienda. Había que pagar o quedarse en la calle. 
   El sábado inmediato acompañó al Humedal Pinín a su padre. El niño miraba con horror a los contratistas de carne, que eran los tiranos del mercado. La Cordera fue comprada en su justo precio por un rematante de Castilla. Se la hizo una señal en la piel y volvió a su establo de Puao, ya vendida, ajena, tañendo tristemente la esquila. Detrás caminaban Antón de Chinta, taciturno, y Pinín, con ojos como puños. Rosa, al saber la venta, se abrazó al testuz de la Cordera, que inclinaba la cabeza a las caricias como al yugo. 
  "¡Se iba la vieja!", pensaba con el alma destrozada Antón el huraño. 
  "¡Ella será una bestia, pero sus hijos no tenían otra madre ni otra abuela!" [...] 
   Pasaron muchos años. Pinín se hizo mozo y se lo llevó el rey. Ardía la guerra carlista. Antón de Chinta era casero de un cacique de los vencidos; no hubo influencia para declarar inútil a Pinín que, por ser, era como un roble. 
   Y una tarde triste de octubre, Rosa en el prao Somonte, sola, esperaba el paso del tren correo de Gijón, que le llevaba a sus únicos amores, su hermano. Silbó a lo lejos la máquina, apareció el tren en la trinchera, pasó como un relámpago. Rosa, casi metida por las ruedas, pudo ver un instante en un coche de tercera, multitud de cabezas de pobres quintos que gritaban, gesticulaban, saludando a los árboles, al suelo, a los campos, a toda la patria familiar, a la pequeña. que dejaban para ír a morir en las luchas fratricidas de la patria grande, al servicio de un rey y de unas ideas que no conocían. 
   Pinín, con medio cuerpo afuera de una ventanilla, tendió los brazos a su hermana; casi se tocaron. Y Rosa pudo oír entre el estrépito de las ruedas y la gritería de los reclutas la voz distinta de su hermano, que sollozaba exclamando. como inspirado por un recuerdo de dolor lejano: 
   -Adiós, Rosa! . . . ¡Adiós, Cordera! 
   -¡Adiós, Pinín! ¡Pinín de mío alma! . . . 
   "Allá iba, como la otra, como la vaca abuela. Se lo llevaba el mundo. Carne de vaca para los glotones, para los indianos: carne de su alma, carne de cañón para las locuras del mundo, para las ambiciones ajenas." 
   Entre confusiones de dolor y de ideas, pensaba así la pobre hermana viendo el tren perderse a lo lejos, silbando triste, con silbidos que repercutían los castaños, las vegas y los peñascos . . . 
  ¡Qué sola se quedaba! Ahora sí, ahora sí, que era un desierto el prao Somonte. 
  -¡Adiós, Pinín! ¡Adiós, Cordera! 
   Con qué odio miraba Rosa la vía manchada de carbones apagados; con qué ira los alambres del telégrafo. ¡Oh!. bien hacía la Cordera en no acercarse. Aquello era el mundo, lo desconocido, que se lo llevaba todo. Y sin pensarlo, Rosa apoyó la cabeza sobre el palo clavado como un pendón en la punta del Somonte. El viento cantaba en las entrañas del pino seco su canción metálica. Ahora ya lo comprendía Rosa. Era canción de lágrimas, de abandono, de soledad, de muerte. 
   En las vibraciones rápidas, como quejidos, creía oír, muy lejana, la voz que sollozaba por la vía adelante: 
   -¡Adiós, Rosa! ¡Adiós, Cordera!

   3.1. Este texto narra un suceso. ¿Cuál?
   3.2. Señala las partes descriptivas e indica qué se describe en cada una de ellas.
   3.3. El relato realista denuncia costumbres sociales. Identifica los aspectos que critica Clarín en el cuento.
   3.4. El cuento opone la inocencia y bondad de los niños frente a la maldad del mundo desconocido para 
         ellos. Explica estas postura moral del autor.

4.Lenguaje sencillo. Emplea una prosa sencilla y clara, que refleja la manera de hablar de los personajes según su clase social.
   Lee el siguiente fragmento de Los pazos de Ulloa, de Emilia Pardo Bazán y responde a las cuestiones:

   Apartó la muchacha a un lado el botín, y fue colocando platos de peltre, cubiertos de antigua y maciza plata, un mollete  enorme en el centro de la mesa y un jarro de vino proporcionado al pan;  luego se dió prisa a revolver y destapar tarteras, y tomó del vasar una sopera magna.
            De nuevo la increpó airadamente el marqués:
            —¿Y los perros, vamos a ver?  ¿Y los perros?
            Como si también los perros comprendiesen su derecho a ser atendidos antes que nadie, acudieron desde el rincón más oscuro, y, olvidando el cansancio, exhalaron famélicos bostezos, meneando la cola y husmeando con el partido hocico.  Julián creyó al pronto que se había aumentado el número de canes, tres antes y cuatro ahora;  pero al entrar el grupo canino en el círculo de viva luz que proyectaba el fuego, advirtió que lo que tomaba por otro perro no era sino un rapazuelo de tres a cuatro años, cuyo vestido, compuesto de chaquetón acastañado y calzones de blanca estopa, podía desde lejos equivocarse con la piel bicolor de los perdigueros, con quienes parecía vivir el chiquillo en la mejor inteligencia y más estrecha fraternidad.  Primitivo y la moza disponían en cubetas de palo el festín de los animales, entresacado de lo mejor y más grueso del pote;  y el marqués—que vigilaba la operación—, no dándose por satisfecho, escudriñó con una cuchara de hierro las profundidades del caldo, hasta sacar a luz tres gruesas tajadas de cerdo, que fué distribuyendo en las cubetas.  Lanzaban los perros alaridos entrecortados, de interrogación y deseos, sin atreverse aún a tomar posesión de la pitanza;  a una voz de Primitivo, sumieron de golpe el hocico en ella, oyéndose el batir de sus apresuradas mandíbulas y el chasqueo de su lengua glotona.  El chiquillo gateaba por entre las patas de los perdigueros, que, convertidos en fieras por el primer impulso del hambre no saciada todavía, le miraban de reojo, regañando los dientes y exhalando ronquidos amenazadores;  de pronto, la criatura, incitada por el tasajo que sobrenadaba en la cubeta de la perra Chula, tendió la mano para cogerlo, y la perra, torciendo la cabeza, lanzó una feroz dentellada que por fortuna sólo alcanzó la manga del chico, obligándole a refugiarse más que de prisa, asustado y lloriqueando, entre las sayas de la moza, ya ocupada en servir caldo a los racionales.  Julián, que empezaba a descalzarse los guantes, se compadeció del chiquillo, y, bajándose, le tomó en brazos, pudiendo ver que, a pesar de la mugre, la roña, el miedo y el llanto, era el más hermoso angelote del mundo.
            —¡Pobre!— murmuró cariñosamente.  —¿Te ha mordido la perra?  ¿Te hizo sangre?  ¿Dónde te duele;  me los dices?  Calla, que vamos a reñirle a la perra nosotros.  ¡Pícara, malvada!
            Reparó el capellán que estas palabras suyas produjeron singular efecto en el marqués.  Se contrajo su fisonomía:  sus cejas se fruncieron, y arrancándole a Julián el chiquillo, con brusco movimiento le sentó en sus rodillas, palpándole las manos a ver si las tenía mordidas o lastimadas.  Seguro ya de que sólo el chaquetón había padecido, soltó la risa.
            —¡Farsante!— gritó.  —Ni siquiera te ha tocado la Chula.  Y tú ¿para qué vas a meterte con ella?  Un día come media nalga, y después lagrimitas.  ¡A callarse y a reírse ahora mismo!  ¿En qué se conocen los valientes?
            Diciendo así, colmaba de vino su vaso y se lo presentaba al niño, que, cogiéndolo sin vacilar, lo apuró de un sorbo.  El marqués aplaudió:
            —¡Requetebién!  ¡Viva la gente templada!

   4.1. Explica cómo se manifiestan en este relato el despotismo y la crueldad del marqués.
   4.2. Observa el lenguaje. ¿Se corresponden con el estilo propio del Realismo? Justifica la respuesta.

5. El Naturalismo.  Es una evolución del Realismo. Defiende la idea de que el comportamiento humano es fruto de su herencia genética y del medio en que vive.
   Lee el siguiente fragmento de La Barraca, de Vicente Blasco Ibáñez y responde a las cuestiones:

   No eran flojos los trabajos sufridos por don Joaquín para hacerse entender de sus discípulos y que no reculasen ante el idioma castellano. Los había de ellos que llevaban dos meses en la escuela y abrían desmesuradamente los ojos y se rascaban el cogote sin entender lo que el maestro quería decirles con unas palabras jamás oídas en su barraca.[...]
   Interpelaba a toda aquella pillería roñosa, de pies descalzos y faldones al aire, con desmesurada urbanidad.
   -A ver, señor de Llopis, levántese usted.
   Y el señor de Llopis, un granuja de siete años, con el pantalón a media pierna, sostenido por un tirante, echábase en el banco abajo y se cuadraba ante el maestro, mirando de reojo la terrible caña.
   -Hace un rato que veo a usted hurgándose las narices y haciendo pelotillas. Vicio feo, señor de Llopis; crea usted a su maestro. Por esta vez pase, porque es usted aplicado y sabe la tabla de multiplicar; pero la sabiduría es poca cosa cuando no va acompañada por la buena crianza. No olvide usted esto, señor de Llopis.
   Y el de las pelotillas lo aprobaba todo contento de salir de la advertencia sin el cañazo, cuando otro grandullón que estaba su lado en el banco y debía guardar antiguos resentimientos, al verlo en pie y con las posaderas libres, le aplicó en ella un pellizco traidor.
   -¡Ay! ¡Ay!... Siñor maestro -gritó el muchacho-. Morros d'aca me pellisca.
   ¡Qué explosión de cólera la de don Joaquín! Lo que más le irritaba era la afición de los muchachos a llamarse por los apodos de sus padres y aun a fabricarlos nuevos.
   -¿Quién es Morros d'aca?... El señor de Peris, querrá usted decir. ¡Qué modo de hablar. Dios mío! Parece que esto sea una taberna... ¡Si a lo menos hubiese usted dicho Morros de jaca! Descrísmese usted enseñando a estos imbéciles. ¡Brutos!!...
   Y, enarbolando la caña, empezó a repetir sonoros golpes: al uno, por el pellizco, y al otro, por «impropiedad de lenguaje», como decía, bufando, don Joaquín sin parar en sus cañazos. Tan a ciegas iban los golpes, que los demás muchachos se apretaban en los bancos, cabeza en el hombro del vecino; y a un chiquitín, el hijo pequeño de Batiste, asustado por el estrépito de la caña, se le fué el cuerpo.
   Esto amansó al profesor y le hizo recobrar su perdida majestad, mientras el apaleado auditorio se tapaba las narices.
   Doña Pepa -dijo a su mujer-, llévese usted al señor de Borrull, que está indispuesto, y límpielo detrás de la escuela.
   Y la mujerona que tenía cierto afecto a los tres hijos de Batiste porque pagaban todos los sábados, agarró de una mano al señor de Borrull, el cual salió de la escuela balanceándose sobre las tiernas piernecitas, llorando todavía el susto y enseñando algo más que el faldón por la abertura trasera de los calzones.
   Pasados estos incidentes, volvía otra vez la lección cantada, y la arboleda parecía estremecerse de fastidio al tamizar entre sus ramajes este monótono sonsonete.

   5.1. ¿Podríamos considerar este relato como un texto realista? Justifica tu respuesta.
   5.2. Se dice que Blasco Ibáñez es el autor más representativo del Naturalismo en España. Señala los                    principales rasgos naturalistas.

SACAR CONCLUSIONES
a) ¿Crees que en todos los textos anteriores queda reflejada la observación de la realidad? ¿Por qué?
b) ¿Crees que los autores de estos textos tienen alguna intención didáctica o social? ¿Denuncian alguna situación?

domingo, 24 de noviembre de 2013

¿CÓMO SE DESCRIBE UN INVENTO?

   Imagina que tienes la oportunidad de escribir una carta a una persona que vivió en el siglo XIX para explicarle el funcionamiento de uno de los más importantes medios de comunicación del siglo XXI: el ordenador o el teléfono móvil. 













Debes indicar las instrucciones de uso de este objeto para que se dé cuenta de las ventajas y los inconvenientes que aporta a la sociedad.

    Ten en cuenta que no conoce su funcionamiento, por lo que tendrás que explicar incluso los detalles.

1º) Buscar información. Debes recoger la mayor cantidad de datos posible sobre el invento: su tamaño, su forma, qué partes tiene, cómo se enciende y se apaga, qué botones tiene y para qué sirven...

2º) Ordenar la información. En un texto expositivo, el orden en que se da la información es muy importante: de lo general a los detalles o a la inversa. Ve uno por uno siguiendo los pasos para que la persona a la que escribes entienda su funcionamiento y sepa usarlo. Para ordenar la información hay que recordar la importancia de los marcadores del discurso de organización: en primer lugar, en segundo lugar, por un lado, por otro lado... 
  Recuerda mencionar las advertencias de uso, la limpieza del aparato si es que es necesaria, el cambio de pilas o batería, si las tiene y otros detalles.
   Debes acompañar tus explicaciones con un dibujo que indique las partes del invento.

3º) Presentar la información. Recuerda que estás escribiendo una carta, por lo que tus instrucciones deben aparecer dentro de ese contexto.  En el cuerpo aparecerá el motivo de tu carta y a continuación las instrucciones lo más detalladas posibles del invento. 

¡Manos a la obra!